29.10.05

La novia cadáver

1. Les ENCANTARÁ a los fanáticos de "Bitelchús", porque la estética del inframundo es igualita, aunque más cálida.

2. No es tan original como "Pesadilla antes de Navidad", en el sentido de que esta historia es menos rompedora. Sin embargo, los personajes están mucho más definidos, se nota que tenían más tiempo y dinero, la historia funciona mejor aún. Impagables los padres de ambos.

3. PROHIBIDO PERDERSE LOS PRIMEROS MINUTOS, son una go-za-da, con un timing buenísimo, y fundamentales para meterte en situación.

4. Las canciones no te sacan de la película, casi ni te das cuenta del cambio música-diálogo, así que tranquilos los que odian los musicales, no les saldrán ronchas. Como peculiaridad, la que narra la historia de la novia (en la versión original) es cantada por el propio compositor de la banda sonora.

5. Si no la ves en cine lo lamentarás por los siglos de los siglos. La escenografía está cuidada al milímetro, y muchos detalles se perderían en pantalla pequeña.

6. Sííííí, vaaaleeee... también es romántica hasta decir basta, pero siempre en el sentido "burtoniano" de la palabra, tranquilos.

Y ya, que de tanto hablar de ella me están entrando unas ganas locas de volver a verla.

27.10.05

Hipermidiclorianosis

No puedo ocultarlo por más tiempo. Sufro de hipermidiclorianosis por saturación desde que tenía once años. Era una tarde tonta de domingo, y a los del Canal Nou, guiados por la Fuerza sin duda, se les ocurrió poner "Star wars", "El imperio contraataca" y "El retorno del jedi" seguidas, desde las tres y media hasta las nueve y media de la noche. Y desde entonces la Fuerza en mí presente está. A mi hermanita consecutiva la llamo Chewbacca, mis reflejos jedi me permiten adivinar cuándo el coche de al lado me va a hacer una pirula, me cago regularmente en la madre del capullo a quien se le ocurrió que Yoda podría quedar bien en CGI, pego botes de alegría cuando me entero que a lo mejor Mark Hamill hace de Joker en la próxima de Batman, los bakalas alicantinos me recuerdan cada vez más a los moradores de las arenas... En fin, que si un día oís que alguien le ha pegado fuego a un almacén que contenía un millón de copias de la puajlogía nueva en formato widescreen, por favor, no me delatéis, son órdenes del Consejo...

24.10.05

Otra

Me quejo de mi vida, del bombardeo constante de canalladas, catástrofes, obligaciones, roces... hasta querer abrirme la cabeza contra la pared. Y se me olvida que en este mismo momento:

- una persona está limpiando meados, escupitajos y compresas sanguinolentas

- otra lleva siete horas de pie, sin parar, pintando objetos con productos tóxicos

- otra espera pacientemente a que los restaurantes cierren y limpien, para que saquen los cubos y poder buscar su cena

- otra soporta, en un arcén de la Casa de Campo, las embestidas de un borracho, hediondo y gonorreico

- otra acaba de robar a su madre a punta de navaja para pagarse la dosis

- otra está a punto de morir por falta de agua y de comida

- otra...

- otra...

- otra...

- otra...

- otra...

- otra...

- otra...

- otra...

- otra...

19.10.05

Dazzled

Quince años. Audiovisuales. La de inglés nos proporciona la dosis mensual de V.O.S. para que cojamos soltura (y de paso descansar un poco) Hacía frío, la sala olía a sucio y los tíos marmurdoneaban al fondo. Habíamos trabajado una reducción del libro de Stoker en clase, ya sabíamos de qué iba, y cómo acababa, pero a los dos minutos no me acordaba ni del frío. ¡Dios, aquello era una puta maravilla! Una oscuridad tan refulgente que hacía daño a los ojos, casi podía notar la densidad de la sangre en la boca, y los latidos en la punta de los dedos. Y el amor, ese amor por el que yo también hubiera "cruzado océanos de tiempo", esa unión contra el cielo y el infierno, que sin embargo parecía tan cercana, tan posible... Y de remate aquella canción, justo cuando ya no podía esperar nada más. Se me hizo fuerte dentro de ese huequito que tengo en el centro del pecho, y ya no hubo forma de sacarla de ahí.

9.10.05

Terenci

Era uno de tantos domingos, tras la tradicional lucha fraticida por leer el Miguelito en el País Semanal (ahora es por Maitena) Gané yo, y salí pitando a parapetarme en el baño antes de que me zurraran mis herman@s. Y al pasar las hojas, me encontré con su foto y un título, "Máscaras alejandrinas". Si soy sincera, no recuerdo de que iba ese primer artículo, pero sí lo muchísimo que me gustó, lo que me sorprendió que hablara de ópera, de Egipto, de cine (cosas que hasta entonces sólo oía en mi casa, para la gente de mi clase era como hablarles de marcianos) y cómo a partir de entonces cada semana, nada más leerlo, recortaba con mimo la página del suplemento, la doblaba de modo que la foto quedase visible y lo guardaba en una caja de zapatos que escondía debajo de la cama. Más adelante ataqué sus libros, me deleité con sus entrevistas y me dolió su muerte, pero nada tan embriagador como aquellas primeras borracheras de palabras...

7.10.05

Prisa

"No, nena, no te preocupes, no tengo prisa, me espero a que me toque, no me cueles, que tu hija tiene cara de cansada. ¿No ves que soy viuda y vivo sola? Desde que se murió mi marido ya no tengo prisa por llegar a ningún sitio. No hay nada que me haga tener ganas de vivir. Mis hijos aparecen de uvas a peras por mi casa, y cada vez que vienen tengo que tener la cartera abierta, y sólo vuelven cuando necesitan más dinero. ¿Cómo quieres que tenga prisa? Ojalá la tuviera, nena, ojalá la tuviera..." Se le llenaron los ojos de lágrimas, tan pequeñita, el pelo blanco, la ropa negra, una bolsa del supermercado con un paquete de galletas y otro de leche, mi madre consolándola como buenamente podía, y yo a un metro, descargando la compra a toda leche para que no se me notara que yo también estaba a punto de llorar...

6.10.05

Diferente

Así es Charlie Kaufman, uno de los pocos guionistas con seso que quedan en Hollywood. En sus historias puedes esperar cualquier cosa, desde una empresa que borra los recuerdos indeseados hasta una Meryl Streep adicta a las drogas selváticas, pasando por el uso y disfrute del interior de la cabeza de John Malkovich. Y sin embargo funciona, te lo tragas todo de principio a fin sin pestañear. Lo que mejor hace, dibujar personalidades, asquerosamente reales, débiles, vulgares, equivocadas, necias, y aún así atractivas hasta decir basta. Kaufman ha vuelto a descubrir esa cerradura por la que en otro tiempo los buenos guionistas nos dejaban asomarnos para saborear la condición humana. Y para muestra un botón:



Hay alguna idea original en mi cabeza, en mi cabeza calva. Tal vez, si fuera más feliz, no se me caería el pelo. La vida son dos días. Necesito vivirlos al máximo. Hoy es el primer día del resto de mi vida. Soy un tópico ambulante.
Tengo que ir al médico a que me vea la pierna. Tengo algo, un bulto. He vuelto a llamar al dentista. Lo voy dejando. Si me dejara las cosas de un día para otro, sería más feliz. Me paso el día sin mover este culo de "foca". Si no tuviera el culo tan gordo, sería más feliz. No tendría que llevar siempre las camisas por fuera; como si engañara a alguien. FOCA. Debería empezar a correr otra vez. 8 kilómetros al día, pero hacerlo de verdad. O hacer escalada, pero tengo que dar un giro a mi vida. ¿Qué tengo que hacer? Tengo que enamorarme. Tengo que echarme novia. Tengo que leer más, cultivarme... Si aprendiera ruso o yo qué sé... O tocar un instrumento. Podría aprender chino, sería "el guionista que sabe chino y toca el oboe". Eso sería brutal. Debería cortarme el pelo al uno. Dejar de hacer creer a todos y a mí mismo que tengo una mata de pelo... ¡Qué ridículo!
Ser auténtico, una persona segura, ¿no es eso lo que atrae a las mujeres? Los hombres no tienen que ser atractivos. Aunque eso no es verdad, sobre todo hoy en día. Hoy se les exige tanto a los hombres como a las mujeres. ¿Por qué debería creer que debo pedir perdón por existir? Quizás sea la química celular. Quizás es eso lo que me pasa, una alteración química. Todos mis problemas y mi ansiedad podrían deberse a un desequilibrio químico o a una serie de psinapsis defectuosas. Tengo que hacérmela mirar. Aunque seguiré siendo feo, eso no tiene cura.

(Monólogo inicial de Nicholas Cage en "Adaptation")

4.10.05

Esperado

Cuando me ponen una inyección, prefiero mirar, así sé cuándo me va a doler, me conciencio y paso el trago con toda tranquilidad. Y en general, cuando sé lo que va a ocurrir, por extraordinariamente malo o bueno que sea, lo asumo sin que me dé un vuelco el corazón. Por eso, cuando hoy ha llegado la hora del eclipse, para el que ya estaba perfectamente pertrechada con las gafas recomendadas, del cual ya sabía la hora exacta en la que se iba a producir, el aspecto que iba a ofrecer en todas sus fases... ha sido como si me destriparan la película, tan esperado que no he sentido prácticamente nada.