28.6.05

-mente

Cada vez que veo "La tentación vive arriba" me siento identificada con un dedo burlón, aunque tierno. Y no, no es con Richard Sherman (Tom Ewell), y mucho menos con la chica (Marilyn), sino con el buscador oficial del remo de Rickie a este lado del Potomac, Tom MacKenzie (Sonny Tufts), y no por pertenecer al género masculino (sólo me faltaba eso) o mi buen aspecto físico, sino por su característica definitoria: un abuso insufrible de los adverbios acabados en -mente, además sin demasiada propiedad semántica. Yo personalMENTE no llego a usarlos a la buena de Dios, pero debo admitir que aparecen demasiado cada vez que escribo algo. Y finalMENTE, después de muchas vueltas, he descubierto la razón. Me preocupa tanto lo que puedan deducir, entender, etc., los demás de cada palabra que digo, cada cosa que hago, que me obsesiono con dar el tono absolutaMENTE exacto a todo. Tengo que empezar a plantearme la vida de otro modo, más relajada... MENTE.